ALCOHOL, SEX AND WEED
La mezcla o mixtura entre las drogas alcohol y el sexo, no es nada fácil hablar de este tema, esto por dos motivos: el primero porque cada persona tiene experiencias diferentes y todos reaccionan de manera diferente por eso un parecer no es nunca igual para todos y segundo porque cuando las personas se sienten involucradas también se sienten juzgadas y fácilmente tienden a defenderse, ya no importa la verdad, luchan solo para no sentirse atacados. Nadie niega algo si no le conviene por lo que es normal que las personas más involucradas, piense solo en auto justificarse, se cierran al diálogo y no dejan lugar a la duda ni a la reflexión. Desde un punto de vista psicológico es importante reflexionar sobre las inseguridades y miedos que llevan a muchas personas a necesitar "ayudas" antes de tener relaciones sexuales: lo que en general se espera del placer, sobre qué necesidades el sexo realmente debe satisfacer o suplir y qué carencias llenar. Así como cuestionarse sobre un uso de la sexualidad cada vez más desechable (tipico de la mentalidad de consumo) en detrimento de una involución afectivo-relacional.
NO SOMOS TODOS IGUALES POR ESO NO ACTUAMOS IGUAL
Cada droga afecta el cuerpo de manera diferente y la respuesta de cada persona es diferente en relación a la capacidad del cuerpo para interactuar con las drogas y el alcohol, quièn aguanta mucho y quièn aguata poco, hay quièn se vuelve peligroso bajo el efecto de la droga y el alcohol y hay quièn se vuelve simpatico e inofensivo. Sin embargo, el abuso de drogas y alcohol a la larga conduce a un único efecto secundario en lo que se refiere a la esfera sexual: la reducción del deseo sexual y el consiguiente rendimiento sexual insatisfactorio, porque como veremos afectan el principal motor a nivel fisico (la presión sanguinea) y el principal motor a nivel psíquico (la atenciòn o dedicaciòn).
ALCOHOL, UNA DROGA LEGALIZADA EN BENEFICIO DE LOS GOBIERNOS
Una droga letal y mortal que actúa a cámara lenta, legalizada porque beneficia a los gobiernos y las mafias que agrupan, y por eso mismo se habla muy poco de lo mucho que se debe informar a la sociedad. Es demostrado científicamente que es dañino y perjudicial para la salud tanto el alcohol como el humo ¿Por qué los gobiernos no luchan contra el alcohol o el vicio de fumar y prohíben absolutamente su venta? porque es un comercio en su poder por eso lo usan, mientras que la droga aún no tiene el monopolio estatal, entonces su fingida lucha social no es más que una lucha clandestina por quién tendrá el poder absoluto sobre las drogas pesantes. El problema no es la droga sino no saber como legalizarla (Pablo Escobar lo demostrò en su historia) porque al gobierno no le interesa si te hace mal o bien lo que consumas sino si el mismo se lucra.
Como decía el mitico Al Capone: "Cuando vendo alcohol lo llaman contrabando,
cuando mis clientes lo sirven en Lakeshore Drive lo llaman hospitalidad".
EL PODER DESINHIBITORIO DE LAS DROGAS Y EL ALCOHOL
La mayoría de las drogas utilizadas en el campo de la medicina son reconocidas por sus efectos calmantes, como los opiáceos de origen natural y, en particular, la morfina. El problema no es beber sino la dosis, como en el caso del veneno: si mucho te mata, si poco te intoxica, si es justo es medicinal. Del mismo modo, la cannabis o marihuana es reconocida como una sustancia relajante y, a menudo, quienes lo toman lo consideran una forma de estar menos ansiosos y más desinhibidos sexualmente. Es obvio que sin ansiedad, sin miedo y completamente desinhibido el sexo es mas placentero, mas fácil, incluso las mujeres muy neuróticas pueden dejarse llevar y finalmente tener un orgasmo, pero los efectos son diferentes de sujeto a sujeto, pero con el tiempo si se vuelve una practica adicta, todo se invierte y lo que era positivo se vuelve negativo, tales drogas cuando pasan el grado de tolerancia (adicciòn) crean en el ambito sexual desinterés sexual, disfunción eréctil o problemas de eyaculación.
"Siempre haz sobrio lo que dices que haces cuando estás borracho.
Aprenderás a mantener la boca cerrada".
Ernest Hemingway
SIN EL FRENO A MANO CON LA COPA EN MANO
El alcohol en el imaginario colectivo ha sufrido la influencia de los clásicos clichés falsos y falaces que lo creen un afrodisiaco, porque es difícil identificar la frontera donde realmente actúa como un efecto desinhibido de la ansiedad, la timidez, incluso del estrés, y cuando se convierte en un peso con sus efectos que queman la claridad mental y desgraciadamente también la del rendimiento físico, basta pensar como hablan o andan sin equilibrio los borrachos, esto también afecta a la erección del pene y el abandonarse en el orgasmo femenino. Es cierto el testimonio de muchas mujeres que se dejan llevar por un trago y se conceden con facilidad al sexo, pero no es el efecto sobre el sexo sino el bloqueo psicológico de nuestras vacilaciones, remordimientos, sentido de culpa y prohibiciones morales lo que desaparece. Digamos que el alcohol rompe nuestras inhibiciones, por eso las personas un poco borrachas se sienten seguras de si mismas, no tímidas, esbeltas, incluso se gustan físicamente lo que también las hace seductoras. Así que disipemos el falso mito: el alcohol no es un afrodisíaco sino un inhibidor que actúa en nuestro cerebro rompiendo nuestros diques de miedo, decoro, privacidad, timidez y en muchos casos incluso el respeto.
Los hombres siempre se han interesado en todo lo que pueda aumentar su libido o potencia sexual, por lo que las drogas y el alcohol siempre han sido un accesorio muy utilizado en el sexo. Ya en la antigüedad, los antiguos romanos solían servir a las novicias el cocetum, una bebida que se obtenía mezclando leche, miel y semillas de opio, de la que se creía que tenía propiedades tónicas y casi afrodisíacas.
Es importante recordar que un uso temporal de alcohol en pequeñas dosis puede tener un efecto positivo en el cuerpo y la libido sexual, pero el abuso de alcohol, por otro lado, es extremadamente peligroso tanto para la salud general del cuerpo, afectando los órganos vitales y el sistema nervioso, ambos aniquilando efectivamente el deseo y el rendimiento sexual, lo que lleva a la disfunción eréctil. El abuso del alcohol puede crear disfunciones sexuales incluso graves, como trastornos de la erección y, para las mujeres, problemas de lubricación y trastornos del ciclo menstrual hasta la amenorrea.
Shakespeare en Macbeth afirma que
“El alcohol aumenta el deseo, pero disminuye el rendimiento”.
De hecho, el alcohol inhibiría los centros del cerebro que regulan el miedo, reduciendo la ansiedad y aumentando la capacidad de expresar la libido. Cuanto más aumenta el consumo de alcohol, mayor es el riesgo, ya que los efectos inhiben todo el circuito de la sexualidad, incluida la zona del deseo, provocando dificultad en la erección, impotencia y frigidez. En pocas palabras es como si te aumentaran el salario del doble porque te han triplicado los gastos.
New York - 1926, fumadores de Opio
El opio, que siempre se ha considerado un afrodisíaco, al ser un sedante enlentece los reflejos y la vitalidad del cuerpo, aumentando simultáneamente la euforia y la resistencia al dolor físico, de forma similar al etanol. Si se fuma, manifiesta sus efectos mucho antes que la ingestión. También provoca sequedad de boca y aumento de la temperatura corporal. Durante la asunción se puede pasar de la vigilia al inconsciente y viceversa. El uso prolongado puede causar abscesos, venas colapsadas, enfermedad hepática y, en casos raros, neumonía, así como un sistema inmunitario debilitado, reducen el deseo e inhiben todas las etapas de la respuesta al instinto sexual.
El alcohol y las drogas suprimen las inhibiciones
y cancelan las sublimaciones
por eso se sientes dioses actuando como bestias
(s. freud)
La cocaína es considerada la droga sexual por excelencia gracias a su acción dopaminérgica, de hecho aumenta el deseo y la excitación, por eso es posible tener relaciones sexuales durante horas e incluso durante toda la noche, pero el orgasmo retrasado e incluso la incapacidad de eyacular, puede traer dolor y problemas al 'sistema genital, si la situación se repite varias veces, se termina incluso en problemas sexuales graves, porque a la larga inhibe el orgasmo en ambos sexos debido a una condición reactiva de hiperprolactinemia: irregularidades menstruales, oligomenorrea o amenorrea (ausencia del ciclo o exceso de ciclo), sequedad vaginal también con dolor, en los hombres aumento de los senos, disminución de la masa muscular y finalmente la liberación de sustancias que reducen el flujo de sangre al pene. Esto impide el logro de la cantidad adecuada de sangre necesaria para tener una erección válida causando disfunción eréctil. Podríamos concluir diciendo que la cocaína y las relaciones sexuales son enemigos que al principio tenían cenas y fiestas maravillosas y terminaron odiándose a muerte.
BREVE HISTORIA DEL ALCOHOL
El uso excesivo de alcohol tiene una larga historia. Fuentes bíblicas, egipcias y babilónicas nos hablan ya de historias de abuso y adicción. En algunas civilizaciones antiguas se veneraba el alcohol mientras que en otras se condenaba su abuso. El consumo excesivo de alcohol y la embriaguez han sido reconocidos como causa de problemas sociales desde hace ya miles de años. Sin embargo, la definición de alcoholismo crónico y sus consecuencias médicas negativas no se establecieron hasta el siglo XVIII. En 1647, un monje griego llamado Agapios documentó por primera vez que el abuso crónico de alcohol está asociado con la toxicidad del sistema nervioso y una amplia gama de otras dolencias médicas, como convulsiones, parálisis y hemorragia interna. En la década de 1920, los efectos del abuso del alcohol y la embriaguez crónica llevaron a la prohibición en Estados Unidos, pero solo se aplicó por un corto tiempo. En 2005, los costos anuales incurridos por la economía estadounidense debido a la adicción y el abuso del alcohol se estimaron en aproximadamente $ 220 mil millones anuales, más que el cáncer y la obesidad, sin embargo, como el alcohol es uno de los principales ingresos económicos del estado, se hacen de la vista gorda y están siempre calladitos.
No pienses en ahogar tus penas en alcohol.
El alcohol saben nadar y hasta pescar
"No hay nada malo con la sobriedad en pequeñas dosis".
El alcohol y las drogas, como toda desinhibición emocional, engañan a la persona, porque en ese momento te vuelves seguro de ti mismo, alegre, cargado, pero todo es un fantasma de DEGRADACIÓN, después que pasa el efecto se vuelve peor que antes y con un problema más: la adicción. Hay más mujeres solitarias que beben clandestinamente en casa de las que te imaginas, revela un informe elaborado por psicólogos y un centro de recuperación para alcohólicos anónimos. El porcentaje de mujeres que se refugian en el alcohol es cada vez más alarmante. En este caso la igualdad con el hombre las hace inferiores como ellos.
"Nada hace que una mujer se vea más bonita
que tres cócteles en el cerebro de un hombre".
Leopoldo Fetchner
Cuando un vicio se patrocina con el sexo
se vuelve herméticamente licencioso,
yo diría casi legitimo
LA LUCHA ENTRE LA TOLERANCIA Y LA ABSTINENCIA (Sex and Drugs)
El alcohol y las drogas aumentan la cantidad de dopamina en determinadas zonas del cerebro, uno de los neurotransmisores de nuestro sistema nervioso, que al unirse a determinados receptores provoca sensaciones de placer y bienestar en el individuo. Tanto la parte mental como la fisiológica, sin embargo, se acostumbran a la presencia de ciertas cantidades de alcohol o drogas, según un mecanismo adictivo; de esta manera la persona necesita progresivamente más y más cantidades de estas sustancias para lograr los mismos efectos eufóricos experimentados anteriormente (este es el nivel de Tolerancia) y experimenta síntomas psicofísicos negativos en caso de que ya no se disponga de alcohol o drogas (surge el efecto de la abstinencia), pero para aplacar los dolores de la abstinencia hay que superar el nivel de tolerancia, por lo que se ha creado una verdadera adicción, un círculo vicioso detrás de un callejón sin salida.
El alcohol es como el sexo,
son triángulos obtusos,
no razonan con una mente abierta.
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Después del primer vaso, ves las cosas como te gustaría que fueran.
Después del segundo, las cosas se ven como no son.
Finalmente, después de una resaca, ves las cosas como realmente son, y esto es lo más horrible del mundo. (Oscar Wilde)
Ni conceptos elevados como la libertad, ni sensaciones animales como el sexo, han logrado desatar en la historia un diluvio de pensamientos y conjeturas como lo hicieron las bebidas alcohólicas y las drogas. Perder la razón, el juicio, no saber quién eres, qué haces, dónde estás... nada más es la demostración más baja a la que puede llegar un ser humano: perder la razón sin darse cuenta y creyendo que se la esta gozando.
“Le hablé de mis adicciones en general, sin entrar en detalles de la época negra del año pasado y le confesé que sentía la falta de una gota no tanto para ahogar alguna pena, sino en momentos de celebración, como este, uno, frente a la ventana, pero igual podíamos brindar, él con vino y yo con jugo de manzana. Creo que tendré que alejarme del alcohol para siempre; es más difícil resistirse al alcohol que a las drogas, porque es legal, está disponible y te lo ofrecen en todos lados. Si aceptara una copa debilitaría mi voluntad, me costaría rechazar la segunda y de ahí al abismo de la primera sólo hay unos sorbos. Tuve suerte, le dije a Daniel, porque durante los seis meses en Las Vegas mi adicción no había podido arraigar demasiado y ahora, cuando siento las ganas, recuerdo las palabras de Mike O'Kelly, que es expertos en el campo como un alcohólico rehabilitado, que afirma que la adicción es como el embarazo, sí o no, no hay término medio "
De "El cuaderno de Maya" de Isabel Allende
Hay hoy en día muchas figuras míticas y famosas que elogian tanto las drogas como el tabaquismo y el alcohol. Jim Morrison solía decir: “Si te drogas te entiendo, porque el mundo te enferma; si no, te admiro, porque eres capaz de combatirlo". Pero la idea de que el esfuerzo creativo y las sustancias que alteran la mente están íntimamente ligados es una de las grandes mistificaciones intelectuales pop de nuestro tiempo (Beatles, Pink Floyd, son dos ejemplo de los que dan testimonio de haber creado la musica bajo efectos de las drogas). Los cuatro escritores del siglo XX cuyo trabajo es el principal responsable de esta mitología son probablemente Hemingway, Bukowski, Fitzgerald, Sherwood Anderson y el poeta Dylan Thomas. Pero la afirmación de que las drogas y el alcohol son necesarios para sofocar una sensibilidad más perceptiva es solo la tontería auto justificadora habitual. Se drogaban porque tenia una sombra psíquica de la cual se tenían que esconder no porque la droga los volviera geniales. Hemingway y Fitzgerald no bebían porque fueran creativos, diferentes o moralmente débiles. Bebían porque eso es lo que hacen los alcohólicos. Probablemente sea cierto que las personas creativas son más vulnerables que otras al alcoholismo y la adicción a las drogas, seguramente tenian un potencial de genialidad pero decir que fueron las drogas a darselo es una excusa muy sutil. Como decìa el genio de Salvador Dalì: “Yo no tomo drogas. Soy una droga".
HORMONAS FEMENINAS Y CERVEZA
¡¡¡Será cierto que la cerveza contiene una gran cantidad de hormonas femeninas!!! ???
Trate de verificar el hecho: chúpense unas veinte cervezas, ¡esto exclusivamente con fines científicos y de investigación evidente, nada de personal¡ El resultado de esta verificación fue asombroso con algunos hombres. De hecho, al final de las 20 vueltas sucedió que los chicos:
- Habían subido de peso.
- Hablaban mucho pero sin decir nada.
- Tenían dificultad para conducir.
- Era imposible llevar a cabo el más mínimo y simple razonamiento.
- Se negaron a admitir que estaban equivocados a pesar de que la evidencia lo demostraba ampliamente.
- para colmo, se meaba cada 5 minutos y además se iban al baño junto con los amigos!
- se recordaban de los viejos amantes y de las mentiras que decían...
- Se volvieron exagerados
Creemos que no tiene sentido llevar más lejos esta experiencia: la evidencia empírica confirma que la cerveza contiene hormonas femeninas de manera irrefutable.
(PD: es un chiste machista claramente)
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