La virginidad es un tabú en peligro de extinción, pero también es un peligro seguir perpetrándolo, porque ya no tiene fundamento como valor moral, es más, se entiende bien como un condicionamiento mental contra la libertad de la mujer; la prueba está en que sólo hablamos de virginidad femenina y nunca de virginidad masculina. Por tanto, deberíamos llamarla vaginidad y no virginidad. Pero como no es sólo un tabú femenino sino también una manía psicotica machista, es necesario PROFUNDIZAR la virginidad (en todos los sentidos) para deshacernos de algunos traumas verdaderamente sin sentido (no virginales). Y lo mejor, descubrir el sentido de otra virginidad que ningún habla: la virginidad del alma.
PREMISA INTRODUCTIVA
¿Virginidad fisica o castración mental psíquica?
¿castidad espiritual o tal vez abstinencia forzada? ¿Qué es realmente la virginidad?
¿Por què se piensa solo a la mujer en la virginidad? como si no existiera el hombre virgen. ¿La virginidad es solo fisica o también espiritual? Sì descubriéramos que es una intención entonces ¿existe un modo de hacer el sexo virgen?; la virginidad es un estado no solo fisico sino también mental, a nivel psicologico, por lo tanto es el alma que se vuelve virgen con la plenitud, por lo cual no se pierde la virginidad sino que se adquiere con el tiempo, ¿y cómo es posible todo ese enredo o nudo virginal?
VIRGINIDAD, MERCANCIA RARA
Catarina Migliorini, brasileña pone a la venta su virginidad y gana 600 mil euros: "Es solo un trabajo - respondió la niña molesta a los periódicos brasileños - de esta manera puedo viajar, rodar una película y ganar dinero. Y luego si lo haces es sólo una vez en tu vida, no por eso me tengo que volver una prostituta". Más lamentable, sin embargo, un joven ruso de 21 años que, al mismo tiempo que Catarina, también había decidido vender su virginal cuerpo, sin embargo, obteniendo solo 3.000 dólares de una dama brasileña. A partir de sus historias se producirá un documental que aún les aportará dinero a los dos. No se asombren, nuestro Dios Dinero està por todas parte y todo lo vende y todo lo compra...
La mujer pierde su virginidad cuando quiere, y el hombre cuando puede
ENRIQUE JARDIEL PONCELA
“Es una superstición infantil del espíritu humano que la virginidad sea considerada una virtud y no la barrera que separa la ignorancia del conocimiento”.
VOLTAIRE
VIRGINIDAD Y JUEGO DE PODER
La política tiene que ver con las relaciones de poder en todos los aspectos de nuestra vida, ya sea pública o privada. Todo es político, incluso las relaciones sexuales consumadas en los dormitorios: si hay dos personas en una habitación, esta es una relación de poder porque casi siempre están los roles de dominación y sometimiento. Los libros sagrados hablan de guerras, relaciones de género, dinero, clases sociales, razas y todas las demás cosas que forman parte de nuestra vida material y moral. La política es un juego basado en el engaño. Como ideología política, la religión también es un juego. Solo la relación entre personas libres escapa a estos controles. La virginidad, vista como un sello de pureza, una garantía de inocencia y un fruto precioso para dar a otro, ha sido a menudo un arma psicológica de dominación de los hombres contra las mujeres.
VIRGINIDAD COMO GARANTÍA DE NO UTILIZADO Y DE DURABILIDAD
La virginidad tiene varios origines: el màs espiritual es el monoteismo, un solo Dios un solo amor es decir monogamia y por ende eres un don para un unica persona (pero si descubres que el panteismo es màs logico y que biologicamente por ende hasta la poligamia, todo el castillo de cartas se viene al suelo). El segundo, màs material o instrumental, fue preservar en una mujer el pilastro de un hogar donde la fidelidad protegiera a la prole los bienes familiares. Todo este poder psíquico y social se podìa amarrar en el himen de una mujer, la virginidad resulto el arma a doble filo (por eso la mujer siempre fue herida con esta tradiciòn). En el poder del patriarcalismo, la mujer era un objeto, por lo tanto una mercancía, la virginidad el medio de garantizar un objeto no utilizado. Si piensas que la mujer estaba ligada a la virginidad hasta el matrimonio como una señal de honestidad y rectitud, mientras que el hombre no lo era, entonces si el hombre era virgen, era un tonto, si la mujer era virgen, era una buena chica; si el hombre era un experto en el sexo era un Don Juan (ahora lo llamamos playboy) pero si ella era una experta en el sexo era una puta (incluso corría el riesgo de ser apedreada, como sigue siendo el caso hoy en día en algunas culturas orientales). La virginidad como el nudo de la tarjeta de un regalo no abierto de hecho, el himen vaginal es como un velo, el nudo de un regalo, era signo de integridad, de regalo cerrado, misterioso, una sorpresa, por lo que el hombre quería una mujer propia, solo suya, lo que garantizó la prueba de originalidad y autenticidad. Esto, sin embargo, hizo que las mujeres fueran "objetos" evaluados precisamente por no ser utilizados, sin contar lo que realmente importaba: si el corazón, la mente y los sentimientos eran vírgenes. La literatura està llena de ejemplos: mujeres que se casaron a la fuerza, sin amor y amando otros hombres, los esposos entraban solo entre sus piernas y nunca en sus corazones donde quedaban vírgenes para siempre.
VIRGINIDAD, MANÍA MASCULINA
La virginidad era impuesta a la mujer por la mentalidad patriarcal para asegurar la primacía de la progenie, el hombre sólo quería a sus propios hijos (ésta es también la raíz de la monogamia), la mujer era una propiedad como la progenie. ¡¡¡La mujer como objeto no era digna de atención ni de placer si era un objeto ya usado!!! En todas las religiones las mujeres han sido oprimidas: Dios siempre ha pertenecido al género masculino. Como cualquier otra ideología política, la virginidad hoy no es màs el valor para proteger la fidelidad, porque el sistema ha cambiado: la familia no es el centro de la sociedad, la familia ya no cuenta, la familia està destinada a transformarse como forma social clásica, por eso el feminismo es un juego machista y las mujeres no se han dado cuenta que las reglas han cambiado: hoy lo que le interesa al hombre es que la mujer sea màs libertina y que "se la de" facilmente, por eso le conviene que las mujeres sean lujuriosas y màs emancipadas, son una pieza fundamental para eliminar tambièn a la familia, de hecho las mujeres hoy en dìa no aspiran facilmente a la maternidad. Todo esto entra dentro el proyecto capitalista, por eso la virginidad no tiene màs algún valor moral a nivel social (para el capitalismo la persona soltera gasta mucho màs, la familia en cambio ahorra). Mientras tanto el hombre romantico sigue buscando una sola virgen, como Maria santísima, para casársela y encerrarla en el altar de su casa., mientras que el hombre materialista busca la virgen como trofeo de caza, para jactarse de haber llegado primero a conquistar una territorio virgen.
VIRGINIDAD, VALOR MEDIEVAL
Para la mujer, la virginidad tenía un significado de dignidad moral, pero el hombre estaba feliz de romper esta dignidad... no ven la hora de encontrar vírgenes, son como trofeos de caza escasos, para el orgullo del hombre es importante ser el primero (se siente el hombre que pone pie en la Luna), cuando en realidad para la mujer lo que importa al final es quien será el que se quede en su corazón: el ultimo que no siempre (casi nunca) es el primero... en algunas culturas ya ni siquiera es un valor, hasta rompen el himen tan pronto como una niña nace para que no tengan traumas cuando tendrán su primer relación sexual; entonces hoy los jóvenes comienzan a tener sexo muy temprano, ya no existe la obligación de la virginidad como sello para el matrimonio (excepto en algunos países árabes o sectas cristianas), es por eso que con el auge del sexo fácilmente descartable, muchos ven la virginidad como un valor medieval que se pierde con el tiempo, como un hábito que ya no está de moda. Pero lo que màs ha hecho que la virginidad pase de moda es justamente el hecho que la mujer es finalmente dueña de su cuerpo y puede manejar la sexualidad a su antojo a la par que los hombres.
Se dice en los cuentos de hadas que para mantener contentos a los dragones, se les ofrecían jóvenes vírgenes. Pero ya nadie cree que existan ciertas criaturas. Ni siquiera los dragones”.
VIRGINIDAD Y\O ABSTINENCIA FORZADA, CINTURONES DE CASTIDAD
Para seguir garantizando la primacía y la autenticidad de sus hijos, ante la ausencia del varón, la mujer en la época antigua y medieval estaba atrapada y encerrada sexualmente con los clásicos cinturones de castidad forzosos (castrar es a veces sinónimo de castidad); pero la Edad Media está distante sólo en el tiempo, no en las intenciones, porque el último invento del mundo de la tecnología viene y se crea en el campo de la ropa interior femenina, una empresa de hecho ha creado... piénsenlo bien... lencería equipada con un sistema GPS incorporado que garantiza la localización del usuario de la lencería, es decir, un auténtico cinturón de castidad de alta tecnología. Esta es la demostración maníaca de control por parte del varón que considera a la mujer un objeto y una propiedad. Claro està que hoy no se usa este control celoso para proteger la virginidad sino la fidelidad.
El culto histérico a la virginidad tiene sus raíces en el hecho de que el hombre sabe por naturaleza que tiende a la corrupción, mientras que le fascina saber que algo permanece puro e intacto, por lo que la virgen es un recordatorio místico del mismo Dios: son intactos, intocables, prohibidos, incomprensibles. La virgen huele a santuario, de alguna manera el hombre la adora, pero como Dios, el hombre se siente traicionado cuando ella permanece distante e impenetrable.
LA VIRGINIDAD FÍSICA NO ES SINÓNIMO DE PUREZA
La pureza no es una cuestión de cuerpo sino de alma, mente y corazón, porque una mujer puede ser infiel con su corazón, con sus pensamientos, con su conciencia, puede tener sólo a tus hijos pero no amarte, puede tener un cinturón de castidad en su vagina, pero sus pensamientos y su corazón pueden estar libres en otra parte, en el corazón de otro hombre. Una prostituta, por cuya vagina han pasado cientos de hombres, podría tener un corazón intacto y puro porque nunca ha amado a nadie (¡Extraño, verdad? ¡Sin embargo, hay muchas putas vírgenes!). La verdadera virginidad no se pierde, más bien es un valor que se consigue con el tiempo. Pero si ves solo el cuerpo y la mujer como objeto, es obvio que la virginidad se haya visto solo como una cuestión fisica e vaginal, es decir al aspecto más superficial y menos importante.
EL ENGAÑO DEL HIMEN
El himen es una fina membrana situada en la boquilla de la vagina que, durante la infancia y la adolescencia, la protege actuando como barrera contra las infecciones y esta es su función biologica. Esta es la razón del porque la mujer tiene himen y el hombre no, su organo sexual al estar abierto es más probable que altere su humedad o pH interior, por lo que queda sujeto a muchas infecciones. Generalmente durante la pubertad el himen se perfora parcialmente para permitir el paso de la sangre menstrual. En algunas culturas, el himen es un símbolo que ha causado bastante trauma a muchas mujeres. Según estas culturas, la integridad del himen es prueba de virginidad, pero hoy sabemos que esto es falso: con la llegada de la adolescencia, la vagina desarrolla sus propias defensas y el himen pierde su utilidad. Lo que muchos no saben es que el himen tiene diferentes formas (como se ve en la foto) y eso causa muchos malentendidos. A continuación se muestran algunos casos completamente diferentes y normales:
1. Mujeres que han tenido relaciones sexuales y se quedan con himen: El pene también puede atravesar un himen muy elástico y a forma de anillo sin provocar desgarro ni pérdida de sangre.
2. Mujeres que nunca han tenido relaciones sexuales y han perdido el himen: un himen fino y ligero se puede romper accidentalmente practicando deportes como montar a caballo, deportes duros y violentos o andar en bicicleta, por lo que su ausencia no demuestra que la mujer no es una virgen.
3. Se han encontrado casos de mujeres embarazadas con el himen intacto, porque existen hímenes a forma de red con agujeros y basta que le hombre deposite en la entrada de la vulva el semen sin penetración para que la mujer quede embarazada. Por lo tanto, ni siquiera los médicos pueden determinar con certeza si una mujer tuvo relaciones sexuales o si se rompió el himen por otros motivos.
4. Hoy sabemos bien clínicamente que el himen puede ser muy fino (hasta el punto de perderlo con movimientos bruscos) en algunas mujeres, mientras en otras mujeres una membrana muy grande y elastica que no se rompe facilmente, en otras inexistente, en otras está tan distendido y duro que cubre toda la cavidad e incluso impide el flujo del ciclo, por lo que debe ser removido quirúrgicamente.
Dicen algunos que ningún ser maligno de los que andan de noche o por la niebla, o el fuego, o por las lagunas o los marjales, y que ninguna escuálida y triste bruja, o inquieto y terco espíritu que rompe sus mágicas cadenas a la hora de la queda, ningún duende u otro tenebroso ser subterráneo tiene poder alguno para hacer daño a una verdadera virgen.
JOHN MILTON
(Foto de la pelìcula del 1972)
La expresión derecho de pernada (en latín vulgar medieval, ius primae noctis, «derecho de la primera noche») se refiere a un presunto derecho que otorgaba a los señores feudales la potestad de mantener relaciones sexuales con cualquier doncella sierva de su feudo que fuera a contraer matrimonio con uno de sus siervos. Este derecho tuvo, supuestamente, vigencia durante la Edad Media en Europa occidental y muchos pueblos en America Latina. Era un abuso de la autoridad (hacendado, administrador de hacienda, jefe político o empleador) en contra de mujeres en condición de dependencia u obediencia (indígenas, campesinas, trabajadoras, inquilinas y otras). Estas prácticas, sin ser legales, fueron impuestas como derechos informales de los patrones, por lo que comúnmente se realizaban ante la pasividad de padres, esposos y comunidad. el señor feudal desea hacer patente su condición de superioridad, haciendo ver que, antes que esposa o hija, la mujer es sierva, y que antes que obedecer al padre o al marido, debe sumisión a su señor. En el mundo feudal el patron buscaba también de asegurarse sus hijos en los esclavos como mano de obra futura.
Sus raíces más ancestrales se encuentran en algunos rituales de prostitución sagrada (Astarté por ejemplo) donde la novia no tenia que llegar inexperta en las manos del futuro esposo. Era un modo muy religioso de darle a la mujer la oportunidad de tener como el hombre otras experiencias, pero en este caso era humillante, porque ella no escogía, sino que le era impuesta como obligación.
Según algunos antropólogos, este derecho puede considerarse la degeneración de un ritual arcaico. La virginidad estaba ligada a un tabú muy fuerte, que sólo podía ser eliminado por una persona poderosa. Es patente la semejanza con ciertos mitos clásicos griegos en los que los dioses abusan sexualmente de los humanos, sin que ello supusiera, necesariamente, una humillación.
La virginidad ya está obsoleta; Dime mejor con quién perdiste la sensibilidad.
CONTROL DE LA VIRGINIDAD: ABUSO SEXUAL
Por lo dicho antes, el himen siempre ha sido considerado como un indicador de si una mujer ha tenido o no relaciones sexuales, pero hoy sabemos que esto es falso (ver post anteriores). Es poco lo que se puede hacer: se han construido mitos milenarios sobre la virginidad femenina, esencialmente diseñados ad hoc para limitar el deseo de las mujeres y "proteger" la legitimidad de los hijos dentro del matrimonio. Estas falsas creencias todavía se sienten mucho y no sólo porque gracias a ellas todos estábamos convencidos de que, con la primera penetración, habremos "perdido" algo, sino también porque en muchos lugares del mundo el propio concepto de virginidad es hoy contra mujeres que se ven obligadas a someterse a prácticas degradantes y médicamente infundadas, como, por ejemplo, pruebas de virginidad. En la actualidad, la virginidad ya no se considera ni un valor ni una garantía de pureza y las pruebas de virginidad se consideran en casi todo el mundo un abuso sexual, excepto en los países musulmanes y entre algunos grupos étnicos, como los gitanos y algunos pueblos africanos y aborígenes, en quien este mito está profundamente arraigado.
“Nadie es virgen, la vida nos ha follado a todos”.
SEXO POR PRIMERA VEZ
El sexo por primera vez es una maravillosa mezcla de ansiedad, miedo y pasión. Hasta hace poco era una vergüenza que los machos fueran vírgenes delante de la manada (significaba no ser expertos, como si follar hiciera sabio a un hombre, he aquí otra demostración de la idiotez de la manada). En cambio, para las mujeres era una virtud, un valor, un tesoro que la hacía más deseable y atractiva. Hoy los valores están cambiando visiblemente: los hombres todavía sueñan con la virgen como trofeo record pero saben que la que tiene experiencia da más satisfacción, mientras la mujer va aprendiendo que tener sexo no quita dignidad, pero tener sexo con un hombre sin dignidad es lo que le afecta.
Somos románticos e idealistas por naturaleza en cuestiones de amor, nos gusta proyectar emociones hacia el futuro por eso esperamos que la primera vez dure para siempre, es por esto que nos gustaría entregarnos solo una vez y que el primer amor sea eterno, pero precisamente por ser inmaduros no entendemos que la primera vez en todo es solo un comienzo y cuando tienes poca experiencia es normal que con el tiempo entiendas que la primera vez quizás no sea la mejor de todas y que no será para siempre así. La primera vez que hacemos algo regularmente cometemos siempre errores, es normal. Para los adolescentes varones puede ser vivido como una necesidad obligatoria de iniciación, que por tanto puede ignorar una implicación afectiva y emocional con la pareja. Excepto que para tener esa experiencia sexual nos enseñaron absurdamente que tenemos que decir "te amo", de lo contrario no hablas en serio, pero ¿qué puede entender una persona del amor a esa tierna edad? Casi nada, es por eso que nuestros jóvenes juegan a ser adultos e inevitablemente cometen errores.
Encontrarnos ambos vírgenes en la primera cita es como un ciego guiando a otro ciego, realmente incomodo. Prefiero con un poco de humildad aceptar que es realmente fascinante, incluso en el sexo, ser estudiante y aprender de algún buen maestro.
LA VIRGINIDAD ES LA POESÍA, NO LA REALIDAD DE LA VIDA
El complejo de la manada nos empuja muchas veces a ser adultos: fumar, decir palabras vulgares y jactarse de tener sexo, son algunos de los comportamiento con los que los jóvenes quieren hacer ver que ya crecieron lo suficiente como para ser lideres, aceptados y dignos de confianza; Esto condiciona muchos a la aventura a ciegas. Para las adolescentes, sin embargo, la primera relación sexual es profundamente deseada en un contexto de devoción romántica y amorosa, porque la mujer necesita más certezas para entregarse, pero a esa edad de amor los jóvenes no saben nada, lo identifican con la pasión y basta. Pero mezclar esta pasión ciega con el amor es uno de los peores errores que tarde o temprano se pagará con el paso de los años con decepciones y frustraciones. Pero el amor es sagrado, no se puede tocar, no se puede hablar mal de él, nadie quiere creer que el amor es usado como una trampa o un engaño y por eso la mayoría termina mal en las relaciones.
La virginidad no es un don,
es una falta de ocasión
¿HA PERDIDO SU VIRGINIDAD?
Esta frase muestra el valor de objeto machista que tienen las mujeres en el sexo: llevan las de perder. Si la niña crece con la idea absurda de que la virginidad es una pérdida siempre estará frustrada, rígida, con sentimientos de culpa. Se trata de una ideologización o manipulación psicológica por parte de la religión que da a la virginidad un valor superior al de la misma mujer. En realidad la mujer no pierde nada, no le quitan un pedazo de vagina, no pierde su dignidad ni su fama, al contrario gana experiencia, vida, placer.
Si vemos la virginidad como una desfloración, es decir, como desgarrar, herir, romper un himen y por tanto quitar e incluso usurpar la virginidad de la mujer, es normal que la primera relación sexual de una mujer esté llena de neurosis y terror. Freud tenía razón a este respecto cuando dijo: "La desfloración no tiene la única consecuencia poco civilizada de vincular permanentemente a la mujer al hombre; desencadena también una reacción arcaica de hostilidad hacia el hombre por parte de la mujer". Hay que eliminar esa forma de decir "una mujer no pierde la virginidad" sino que es el hombre el que cree que perderá a la mujer si no es virgen, es él quien carga con el trauma de las experiencias sexuales previas de la mujer que lo persiguen como fantasmas celosos (Quién sabe, ¿tal vez los que llegaron antes que yo eran mejores que yo?).
¿VIRGINIDAD Y DOLOR?
Disipemos otro mito: si el himen es poco elástico y resistente produce dolor (pero estos casos son mínimos en porcentaje), en el resto de casos la mayoría de las mujeres ni siquiera lo notan, no sufren algún dolor. ¿Por qué entonces este terror? En cuanto al dolor, no es la rotura del himen en sí lo que provoca el dolor, la rotura del himen puede, como mucho, dar una pequeña molestia transitoria, no es un músculo que provoque un desgarro lacerante, es una sutil membrana. Más frecuentemente, el dolor surge de una tensión que se manifiesta cuando la experiencia no es realmente deseada o se hace el amor con miedo y tensión, cuando se vive con sentimiento de culpa, cuando se teme un embarazo y cuando hay malestar hacia el propio cuerpo; si los músculos de la vagina están demasiado tensos, incluso en una mujer no virgen (como las que violan por ejemplo) el dolor es atroz, pero no es por la virginidad. En estos casos, la tensión repercute en la relajación de los músculos vaginales (en particular en la entrada de la vagina) y en el nivel de excitación (con la consiguiente falta de lubricación) es lo que puede ser responsable del dolor. El dolor en la vagina es una enfermedad real llamada vaginismo, vestibulodinia o vulvodinia. El vaginismo es una contracción muscular involuntaria e indolora de la vagina, mientras que la vestibulodinia es una contracción muscular involuntaria pero muy dolorosa (muchas veces la causa es psicológica), pero repito, este dolor no tiene nada que ver con la rotura del himen en la virginidad.
HIMENECTOMÍA Y VAGINISMO
El miedo a romper el himen durante la primera relación sexual o a sentir un dolor absurdo puede llevar a la mujer al vaginismo. Es un miedo sin fundamento porque son poquísimos los casos donde hay un himen muy grueso, en ese caso se requiere la cirugía (himenectomía). El miedo, como otras causa psicológicas (fastidio por el sexo, no amar la persona con la que obligan a hacer sexo, etc...) hacen que involuntariamente los músculos de la vagina se contraen y asì se produce el vaginismo. Se dan muchos casos de mujeres casadas que ya no aman a su esposo y cada vez que èl las busca es imposible hacer sexo, porque los músculos del periné, la vulva y el orificio vaginal se contraen involuntariamente de tal forma que impiden la penetración o hasta un simple examen ginecológico es imposible. El cuerpo se niega, està advirtiendo a la mujer que hay algo en el sexo que no le conviene, en estos casos la mujer tiene que escuchar su cuerpo y buscar las razones del por què se cierra al placer.
Es difícil creer en una religión que valora tanto la castidad y la virginidad.
Madonna Luisa Verónica Ciccone
LA PROHIBICIÓN DE LA MASTURBACIÓN FEMENINA
Si la máxima espiritual es “conócete a ti mismo”, también se aplica a tu cuerpo, necesitas conocerlo y explorarlo. La masturbación es la primera relación sexual que generalmente tienen (a la mano) a su disposición las personas cuando se inicia. Se trata de conocerte a ti mismo. Pero esto hasta ahora había sido condenado por la moral social y la religión, de las que ya hemos hablado en las conferencias sobre la masturbación. Si bien estaba prohibida para los hombres, la masturbación era impensable para las mujeres, porque implicaba la virginidad.
Esta fue la razón principal por la que a las mujeres se les negaba la masturbación, mientras que a los hombres no, porque ella podía romper el himen y liberarse del trauma de la virginidad si lo experimentaba como una exigencia opresiva del mundo masculino. El hombre, por el contrario, sigue siendo aficionado a la masturbación solitaria toda su vida, incluso un porcentaje importante de hombres, incluso casados, recurren ocasionalmente a la masturbación, esto estaba prohibido a las mujeres, pero hoy, afortunadamente, los parámetros han cambiado. Necesitas desarrollar confianza con tu cuerpo, conocerlo poco a poco, descubrir cuáles son los puntos más sensibles, tus gestos y movimientos favoritos. Y, sobre todo, sin miedos ni sentido de culpa, nuestro cuerpo tiene una infinidad de secretos, puntos escondidos de placer, excitación y lograr descubrirlos todos durante la “primera vez” es un poco difícil. Así que nunca pienses que todas las relaciones sexuales serán como la primera vez, sino que será sólo un paso de crecimiento, todo para descubrir.
“La virginidad tiene este atractivo erótico sólo en la medida en que se combina con la juventud; de lo contrario, vuelve a convertirse en un misterio inquietante”.
- Simone de Beauvoir -
PD: traducido sería: una mujer anciana y virgen huele a caducada
VIRGINIDAD Y EMBARAZO
Otro mito estúpido que hay que disipar: no puedes quedar embarazada si eres virgen… ¡esto es falso!. Repetimos, si el himen tiene forma anular o perforada, incluso sin penetración, se han dado casos que el hombre eyacula en la entrada de la vulva y los espermatozoides caminan y pasan, la mujer queda embarazada y sigue virgen, con el himen intacto. Prepararse para la primera relación sexual implica también la necesidad de ser conscientes de los riesgos y tomar las medidas adecuadas para evitarlos. La "primera vez" es, por tanto, una experiencia que no debe ignorar el contacto pleno con las emociones, el momento, la disponibilidad, el deseo y también con algo más prosaico, pero muy útil: el preservativo o, en el límite, no eyacular en el interior la vagina ni tampoco en la entrada de la vulva (ni toques la vagina con las manos untas de semen), porque el riesgo de embarazo siempre está presente, porque si la virgen está en período fértil igualmente queda embarazada. Por lo tanto, aquellos que no se sienten preparados para experimentarlo no deben forzarse ni dejarse forzar. De hecho, las posteriores relaciones también dependen mucho de la calidad de esa primera experiencia, muchas veces durante mucho tiempo. La tormenta emocional es muy potente y lleva a descuidar y olvidarte en ese momento del peligro de un embarazo no deseado y hasta las enfermedades de transmisión sexual.
La virginidad es un constructo social creado por el hombre arcaico
para controlar la vida sexual de las mujeres
VIRGINIDAD Y SOLEDAD
Hoy en día los jóvenes inician demasiado pronto su actividad sexual, aunque empiezan con suaves juegos de caricias y masturbación mutua, pronto pasan al coito real. La perspectiva de la primera relación sexual genera siempre una mezcla de curiosidad, preocupaciones, incertidumbres e incluso miedos que pueden marcar el clima y la calidad de la experiencia. Esto está determinado por razones psicológicas y emocionales, pero también por el contexto cultural en el que vive el sujeto y la creencia religiosa que sigue. Sin embargo, esta experiencia representa un momento muy especial en la vida de una persona y debe abordarse de forma serena, participativa, deseada y siguiendo los propios ritmos internos. Así como la prohibición y por tanto el sentimiento de culpa que puede generar su transgresión, el sentimiento de obligación en el que puede insertarse es igualmente negativo.
El mayor problema es que los jóvenes se encuentran a menudo solos en este período, no confían en sus padres para hablar de estas sensaciones y emociones (temen ser juzgados o reprendidos), suelen confiar en amigos igualmente jóvenes y, por tanto, inmaduros. Pero hay muchos padre demente cerrada a los que ni hablar de estas cosas.
Esta es la época en la que el antiguo valor de la virginidad se transfiere de las personas a los productos: aceite virgen, lana virgen, cera virgen, casette virgen, memoria USB virgen
Guido Clericetti
UNA MENTALIDAD VIRGEN CERRADA, RÍGIDA Y MORALISTA
En nuestra cultura occidental, la idea de que la virginidad era sinónimo de pureza y, por tanto, el acto de entregarse en el sexo, fue formada (o más bien deformada) por el oportuno y masivo icono de la Virgen María. Pero si realmente Dios había ordenado que la mujer fuera más pura al permanecer virgen, ¿por qué no hizo un himen debajo de las axilas o permitió que los niños nacieran a través de otro esfínter, como el anal o el nasal? Tal mentalidad considera la naturaleza imperfecta sucia y traumatizante en esencia y partida, ninguna madre no virgen puede encontrar en la Virgen María un modelo de pureza. Son mentalidades como estas las que han traumatizado nuestra cultura y la mentalidad social de la que hoy somos herederos y de la que debemos pagar y sufrir los efectos castradores, porque psicologicamente este tipo de dogmas castran las emociones y los sentimientos de las personas.
"Hablar a favor de la virginidad es acusar a tu madre".
WILLIAM SHAKESPEARE
VIRGINIDAD, SI ME AMAS ¿ESTÁS LISTA....? ¿PRUÉBAME QUE ERES MARUTA?
El juego machista de la conquista del sexo a través de la excusa del amor: "si de verdad me amas me la tienes que dar", una frase atroz y hasta vulgar, un chantaje psicologico. Sin embargo, muchas veces al ser inmaduras, muchas chicas se involucran en sutiles estafas sentimentales, que puede vivir sin disponibilidad real donde la pareja se pone en posición de chantaje (como por ejemplo: ya que somos novios y me amas, ¿por qué no te entregas a mí?). De hecho, no es raro que se ejerza presión sobre la chica, dándole a la experiencia el significado de una prueba de amor. Este tipo de evidencia pasa por otras conductas y no necesariamente hay un momento adecuado para tener la primera relación sexual, así como tampoco existe una edad especialmente adecuada. Otros, para parecer maduros y adultos, creen que esta es la manera de dar el salto de calidad, de hecho es frecuente entre los chicos que se burlan de sí mismos porque si los vírgenes no tienen experiencia, esta presión empuja a muchos jóvenes a pretender ser experimentados cuando en realidad son vírgenes y se avergüenzan de ello. En cambio, ten paciencia y autoestima, hazlo de forma segura, con sencillez y en el momento adecuado, sin fuerzas ni miedos.
VIRGINIDAD ENTRE CASTIDAD Y CASTRACIÓN,
ENTRE IMPOTENCIA Y REPRESIÓN O ABSTINENCIA
Nacimos para amar y por amar (al menos eso se espera), todo a través del sexo, el don de uno mismo al otro en el cuerpo. El sexo es una parte esencial de nuestra vida. Los que no tienen actividad sexual (como los consagrados a la religión) deben tener otra dedicación mínima IGUAL a la sexual, de lo contrario se fosiliza su ego, de ahí la gente solterona amargada, gruñona, que se queja de todo y siempre nerviosos, porque sin una dedicación de amor el ego se vuelve hacia adentro y emergen neurosis de carácter. Esto no quiere decir que todos los que se dedican al Señor, los consagrados a la castidad, sean personas verdaderamente santas, podemos ver cuántos frailes y monjas son solteronas amargadas y gruñones. Muchos, incluso sin sexo, han podido descargar esta fuerza en otra dedicación como el arte, la música, la ciencia (no es casualidad que los mayores genios de la historia fueran solitarios y solteros). No puedes prescindir del sexo, o lo conviertes en pasión por otra cosa o te conviertes en un maníaco adicto a algún vicio. Los animales en la naturaleza nos ensenan lo mismo: sin sexo o se deprimen o se vuelven violentos, lo mismo los seres humanos. La elección absoluta de la virginidad no está prevista en nuestra evolución ni en nuestra esencia natural, pero quienes la eligen conscientemente saben sacar sus frutos, de lo contrario se convierten en víctimas de su regresión inconsciente.
Las vírgenes no son creíbles porque no tienen experiencia.
VIRGINIDAD MASCULINA
Hemos visto que la virginidad es un tabú que nace dentro de un marco machista impuesto a la mujer, en la Edad Media los cinturones de castidad eran solo para mujeres, hoy vemos algunos para hombres pero en su mayoría se hacen exclusivamente dentro de juegos sadomasoquistas y de rol. No existe una castidad impuesta obligatoriamente al hombre, excepto en casos de castidad requerida en algunas religiones (como la vida religiosa o el sacerdocio católico por ejemplo). En los hombres no hay manifestaciones evidentes de pérdida de la virginidad. De hecho, no coincide, como muchos creen erróneamente, con la rotura del frenillo (el llamado filete, del cual hablaremos en otro album). El desgarro del frenillo sólo ocurre si el frenillo no es lo suficientemente largo y elástico, por eso normalmente permanece pegado al glande siempre para toda la vida aunque el hombre no sea virgen.
En conclusión, la virginidad masculina no existe a nivel de signos físicos visibles como el himen en la mujer. En otro lugar hemos explicado por qué la naturaleza dio a las mujeres esta membrana: protección bacteriana en los primeros años hasta la pubertad.
Me encanta el horror de ser virgen.
HÍMEN FALSO EN VENTA
El himen artificial es una membrana gelatinosa que se coloca en la boca de la vulva. Debe colocarse con precisión antes del coito completo, al penetrar libera un líquido rojo aparentemente similar a la sangre. Y esta "sangre falsa", que fluye en el momento de la relación sexual, sugiere que se ha producido una rotura natural del himen. El himen artificial se utiliza con la intención de "reconstruir" la virginidad perdida. ¡Y el efecto “mujer inmaculada” estaría garantizado! ¿No sería más correcto afirmar la propia libertad sexual y temer recurrir a la mentira? pero en ciertas culturas donde la mujer que no es virgen corre el riesgo de ser rechazada por su marido e incluso lapidada, estos remedios y engaños son necesarios para sobrevivir al obtuso mundo del machismo.
LA VIRGINIDAD COMO ESCONDITE
No olvidemos que en la Edad Media las mujeres no tenían muchas oportunidades de ser independientes, más allá de ser brujas, putas o monjas. Muchas eligieron estos tres caminos simplemente para ser ellas mismas y liberarse de la opresión dominada por los hombres. Érase una vez muchas monjas que entraban al convento porque eran obligadas por sus familias. Hubo algunas, sin embargo, que "eligieron" el camino al monasterio como un mal menor. Su razonamiento debió ser algo así: “Si se la doy (la virginidad) a mi marido, seré su esclava y un instrumento para traer niños al mundo como él quiera; si se la dedico al Señor (siempre virginidad) seré su devota sierva, pero tendré la oportunidad de estudiar, de dedicarme a lo que me gusta, de jugar, cantar, escribir, leer, orar y pensar". Por suerte, mientras nadie las denunciara, de lo contrario estaban en serios problemas, las monjas lesbianas, ya que no sólo escaparon de una esclavitud agravada aún más por su homosexualidad, sino que también tuvieron la oportunidad de vivir maravillosos amores secretos en el interior de los muros del monasterio. Espléndida e inefable libertad en cautiverio. Más afortunadas aún fueron las monjas lesbianas si, gracias a su inteligencia, llegaron a darse cuenta de que, como todo amor, el suyo también estaba bendecido por Dios y también pueden criticarlas, aun sabiendo que los envidiosos no pueden entender ni comprender con misericordia la situación esclavizante de las mujeres en aquella epoca.
SABÍAS QUE.... VIRGINIDAD Y TRADICIONES
Otra costumbre de hace ya algunas décadas, del sur de Italia en los pequeños pueblitos (pueblo pequeño infierno grande, como se dice, para dar prueba concreta de la virginidad de la mujer, era exponer en la ventana las sábanas que habían acogido a los esposos en su noche de bodas. Al poner a la vista los rastros de sangre debidos a la rotura del himen, de hecho, quedó demostrado que la novia en realidad era virgen. La costumbre tenía implicaciones tragicómicas cuando los rastros de sangre, por diversas razones, no estaban allí: entonces se reemplazaba con sangre animal sin que nadie lo supiera. Todo este ridículo solo por vivir del "que dirán los demás".... al final los rastros de sangre fueron tan falsos como la virginidad de la recién casada.
‹‹La lapidación es el primer y más terrible instrumento de destrucción de la ofensa que hombres y simios han tenido a su disposición››.
- Hans von Hentig -
En cambio, Jesús dijo contra esta ley: "El que esté sin pecado, que tire la primera piedra" (Juan 8,7).
LA HIMENOPLASTIA
La himenoplastia es la reparación quirúrgica del himen, una membrana que cierra parcialmente la abertura de la vagina. En muchas culturas y religiones, un himen intacto es un signo de virginidad. Por diversos motivos el himen puede desgarrarse y romperse. Las que más recurren a este intervento son sólo jóvenes musulmanas esclavas de las tradiciones de su religión, también algunas indiana y chinas. Algunas son prostituta que saben que la virginidad es muy bien pagada y con este truco vuelven a ser vírgenes para venderse a caro precio. Y aunque la virginidad es un antiguo tabú y un escenario del sueño machista que trata a la mujer como un objeto no utilizado y por lo tanto valioso, en el corazón de toda mujer permanece el sueño romántico de poder ofrecer este regalo que abre el himen, como el nudo de un regalo, a un hombre que sabrá valorarlo por el resto de su vida, pero... es una quimera pensar que el primer hombre será también el último y permanecerá para siempre.
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